Yo decía que tenía que ser mi año. Y debía serlo, 2010...
Ha tenido de todo supongo, pero el balance final no puede catalogarse como positivo, por más que me pese.
Empecé con ganas, saliendo de una relación, pero con la seguridad de haber hecho las cosas bien, con la certeza de haber dado todo, de haberlo intentado, y de haber cerrado cuando tenía que hacerlo. Fue duro. El dolor que te causé me hizo no querer volver a estar con nadie en mucho tiempo. Te hice llorar. Jamás olvidaré ese momento, porque yo no soy nadie para causar dolor, a pesar de todo el que tú me causaste a mí, y que ya es irreparable. Nunca volveré a dirigirte una sonrisa, ni siquiera una palabra amable... Es de las pocas cosas de las que estoy segura.
Pasaba el tiempo y todo seguía igual. En mi memoria, un partido. Contra Universidad de Salamanca. Ganamos 2-4. Las cosas no me iban bien, y en ese partido marqué dos goles, uno de ellos, el mejor y más bonito de mi vida. Una pared con una compañera que me devolvió el balón por alto, y sin dejarlo caer, y en una posición algo escorada, la empalmé y fue cruzada a la escuadra de la portería.
Este sería de mis últimos recuerdos en MI equipo, ya que en el mes de mayo comencé a plantearme abandonar el club para dar el salto a la división de honor, la máxima categoría. Estuve yendo a entrenar varios días, y en esos días me hicieron creer que era válida, de modo que fiché sin pensarlo más.
Y llegó el verano. Sin duda, de los mejores de mi vida, por no decir el mejor. Lo dediqué a lo que más me gusta hacer: jugar al fútbol. Y no solo jugué, sino que disfruté, hice lo que me apeteció, y di las mejores versiones de mí misma tanto en el campeonato de Arnedo como en el de Colmenarejo. Me atrevo a decir que sería completamente feliz si jugara ese tipo de torneos todos los días... no necesitaría nada más.
Reencuentros con amistades pasadas que vuelven a ser presentes, y un nuevo amor en mi vida. Corto, pero intenso. Quiero pensar que de todo se aprende, y que todo lo que ocurre pasa por alguna razón. Una nueva ilusión que llegó incluso a hacerme ver lo más importante de mi vida como algo secundario. Un sentimiento que me hizo dar lo mejor de mi misma, desde inventar nuevas formas de decir “te quiero” cada día, con palabras diferentes, hasta hacer cualquier tipo de locura con tal de conseguir que me quisiera. Kilómetros y kilómetros por horas, tan solo horas, cerca de ella. ¿Cuántos? ¿300Km? ¿400km? He provocado enfados, a cambio de subirme al techo de mi coche con ella para decirla que soy “capaz”, y besarla. Y terminó. Lo dí todo, pero terminó. Y no me arrepiento.
“Aquel amor que me abrasaba ya no quema, sólo escuece...”. Y lo dicho, de todo se aprende, y aunque sienta miedo, mucho miedo, me volveré a atrever a amar de nuevo, volveré a hacer locuras.
Ahora mi mayor deseo es reunir la fuerza para poder volver a mirarla y sonreír, no pensar en lo que pudo ser y no fue, seguir, al fin y al cabo..
El 2010 ha sido una mierda sobre todo por lo injusta que es la vida. Le admiro, cada día, por su fortaleza. Para mí, su mayor virtud. Siempre ha sabido mantener la compostura en los peores momentos, y sin duda, que sigamos unidos, e incluso con vida, es gracias a él. Fue él quien dio un golpe en la mesa para decir basta cuando mi madre se negaba a ir al hospital para curarse. También fue él quien estuvo al lado de mi hermana en su complicada adolescencia. Es él el primero en preocuparse cuando algo va mal, sin ni siquiera tener la necesidad de preguntar qué ocurre. Es él quien nos acepta tal y como somos, cada uno de nosotros, con nuestras virtudes y nuestros defectos. Es él esa persona a quien cuando comunicaron su enfermedad, nos llamó, uno por uno, y colgó el teléfono antes de ponerse a llorar. Quien no ha derramado una sola lágrima en nuestra presencia hasta hace tan solo unos días, para brindar y dar las gracias a sus hijos por estar a su lado.
Siempre me has dicho que lo que más odias en el mundo es la mentira, y sabes? He descubierto que también yo es lo que más odio.
Por todo lo que he aprendido de ti, por todo lo que nos queda por vivir, porque lo vamos a superar, y porque este año va a ser un año fantástico a tu lado. GRACIAS.
Balance
División de honor, un sueño cumplido...
Hasta el infinito y más allá... Ha sido un placer hacerla sonreír, en el camino nos encontraremos
Enfermedad casi superada... a tu lado, SIEMPRE
http://www.youtube.com/watch?v=Tk8e1HG71RI